TRITOR ENERGY

Una marca de Calidad

La transición energética es una matriz dinámica de procesos que responde a la necesidad de mitigar el cambio climático, generando las oportunidades que lleven a un cambio de paradigma. La transición energética es un reto ambicioso y, al mismo tiempo, un motor de innovación a nivel tecnológico-industrial y socioeconómico.

El CSR es definido por el artículo 183, apdo. 1, letra cc) del Decreto Legislativo 152/2006, Código de Medio Ambiente, como el combustible sólido producido a partir de residuos no peligrosos que cumple las características de clasificación y especificación identificadas en la norma técnica UNI EN 15359.

En concreto, el CSR procede principalmente del tratamiento de RSU (Residuos Sólidos Urbanos) de la fracción resto, fracción que, en el estado actual de las tecnologías disponibles para la gestión de residuos, no puede ser objeto de reutilización o recuperación de materia.

De este modo, la combustión combinada de CSR en hornos para la producción de cemento permite cerrar de manera virtuosa el ciclo de la recogida selectiva.

Los RSU de la fracción resto, para ser clasificados como CSR y ser valorizados energéticamente después en la cementera, son sometidos a una serie de tratamientos físicos y químicos. Su cantidad se reduce mediante la bioestabilización, que elimina la carga bacteriana y la humedad residual, con lo que también mejora el poder calorífico del combustible. A continuación, los residuos se desferrizan y se limpian del material inerte presente (recuperando así la fracción metálica) y, por último, se descloruran y se trituran finamente para mejorar la cinética de combustión, con lo que también se mejora el perfil de emisiones. El resultado es un combustible noble a todos los efectos, que proporciona las calorías necesarias para la producción de clínker, el componente predominante del cemento.

La norma UNI EN 15359 clasifica los CSR en función de los valores límite asumidos por tres importantes parámetros del combustible, estratégicos desde el punto de vista ambiental, tecnológico y prestacional/económico:

  • El valor medio del Poder Calorífico Inferior – PCI (parámetro comercial)
  • El valor medio del contenido de cloro (parámetro del proceso)
  • El valor de la mediana y del 80° percentil del contenido de mercurio (parámetro ambiental)

En función de sus valores, estos parámetros entran en una de las clases, que van de 1 a 5, identificadas por la norma. La combinación de los números de clase de los tres parámetros define el «código de clase» del CSR, que debe incluirse en la especificación del combustible.

Un estudio reciente del Laboratorio REF Ricerche ha estimado las ventajas que se obtendrían en Italia aplicando una tasa de sustitución del 66 % de los combustibles fósiles por CSR-Combustible, en línea con la obtenida en 2017 por Alemania. El estudio ha demostrado que se evitaría la emisión a la atmósfera de 6,8 millones de toneladas equivalentes de CO2 gracias a la biomasa que contienen y a las emisiones de metano evitadas por el hecho de que los residuos, en lugar de enviarse a vertedero, son valorizados energéticamente por la industria cementera.

Por otro lado, en lo que respecta a las ventajas sociales y económicas, el apoyo al cierre del ciclo de residuos que ofrecen las plantas de producción de cemento del país, a través de la combustión combinada de CSR, también supone un beneficio para las comunidades, ya que disminuye los costes de gestión de los residuos urbanos, que se reflejan directamente en el impuesto que pagan los usuarios.

También en relación con los costes energéticos y, por tanto, en favor de la competitividad de las empresas, el uso de CSR reduce significativamente el coste de las calorías utilizadas para la cocción del clínker, en comparación con el uso de combustibles fósiles.

En este contexto nace TRITOR ENERGY,
una marca de calidad que hace que los residuos tratados con la tecnología Tritor sean reconocibles en comparación con el CSR producido con tecnologías mucho menos eficientes en términos de producción y calidad del producto terminado.

Los Residuos se convierten así en un Recurso porque pueden
transformarse en excelentes combustibles, para ser utilizados, por ejemplo, en:

Fábricas de cemento

Industrias con alto consumo energético

Centrales eléctricas

Industrias agrícolas